¿Por qué deberías acudir a un endocrino?

La derivación del médico clínico a un endocrinólogo puede ser preocupante. En realidad, no sabemos mucho acerca de nuestras glándulas endócrinas, son unos órganos ubicados en diferentes partes del cuerpo encargadas de segregar hormonas. Las hormonas son fundamentales para regular el funcionamiento del organismo. A diferencia de las glándulas exócrinas, que liberan sustancias hacia el exterior como la transpiración, las endócrinas envían su producción directamente al torrente sanguíneo. Un endocrino estudiará cómo están funcionando esas glándulas para diagnosticar y corregir desequilibrios.

Principales problemas que atiende un endocrino

Un endocrino o endocrinólogo se ocupa, fundamentalmente, de las enfermedades relacionadas con las hormonas o las glándulas que las producen. De esta forma, esta especialidad está relacionada con el metabolismo en general, y muchas enfermedades no endocrinológicas como la diabetes o la obesidad.

En estos casos un endocrino trabaja en conjunto con otros especialistas. Por ejemplo, en el caso de la diabetes, un endocrino se ocupa del páncreas y la insulina, mientras que el diabetólogo realiza el seguimiento general y atiende otros aspectos de la enfermedad. Frente a problemas relacionados con las glándulas y hormonas sexuales, como la pubertad, menopausia o problemas de infertilidad, colaborará con el ginecólogo.

Las hormonas tienen un papel muy importante en el desarrollo, la reproducción, el crecimiento, regulación de la temperatura corporal, entre otras acciones.  Nuestro organismo cuenta con 8 glándulas endócrinas, como la tiroides, suprarrenal, páncreas, hipotálamo, testículos. Sin embargo, otros órganos también segregan hormonas, como el corazón, los riñones o los ovarios.

El problema endocrinológico más frecuente son los desequilibrios de la glándula tiroides. Está ubicada en el cuello y sus hormonas regulan prácticamente todo el organismo. Según algunos estudios, el 10% de la población española padece problemas de tiroides pero muchos los desconocen. Los problemas van desde desequilibrios de los niveles de hormona tiroidea en sangre hasta cáncer de tiroides.

Otros desequilibrios que también son atendidos por un endocrino:

• Nutrición
• Enfermedades del hígado y el páncreas.
• Obesidad y sobrepeso.
• Diabetes.
• Trastornos ginecológicos.
• Alteraciones del estado de ánimo.
• Funcionamiento de las glándulas pituitaria y suprarrenales.
• Crecimiento y pubertad.

¿Cómo llego a un endocrinólogo?

¿Sospechas que tienes problemas glandulares? Tu médico de cabecera o el médico clínico indicarán algunos estudios, principalmente análisis de sangre, para confirmar el diagnóstico y realizar la derivación.

Las señales de alerta pueden ser:

• Nódulos.
• Cansancio.
• Intolerancia al frío.
• Piel seca o amarillenta.
• Aumento de peso.
• Caída del cabello.
• Aceleración del pulso, sudoración.
• Debilidad muscular.
• Pérdida de peso.
• Otras enfermedades diagnosticadas en las que intervienen glándulas endócrinas.

En realidad no hay suficiente información acerca de las enfermedades endocrinológicas. Según un estudio realizado en España, casi el 40% de la población no sabe nada o casi nada sobre las glándulas, en especial la tiroides. Los problemas hormonales se desarrollan muy lentamente, por eso es difícil detectarlos de manera precoz.

Una vez realizada la derivación a un endocrino, este profesional realizará un examen clínico completo y estudios específicos de acuerdo a los resultados de los análisis indicados por el médico clínico. Por ejemplo puede solicitar análisis especiales, estudios por imágenes o punciones.

El endocrinólogo puede recetar medicamentos, hormonas para compensar el déficit en el caso de un bajo nivel en sangre de las mismas, tratamientos modernos como el yodo radiactivo, o en algunos casos indicará una cirugía.

Factores predisponentes

Los siguientes factores pueden ser causantes de mal funcionamiento del sistema endócrino:

• La edad modifica la producción, secreción y metabolismo de las hormonas. Está asociada a enfermedades como la diabetes tipo 2, también a la menopausia y problemas reproductivos.
• Pueden tener relación con problemas endócrinos como defectos congénitos, cirugías, lesiones traumáticas, infecciones, problemas autoinmunes, tumores.
• Estrés. El estrés tiene una gran influencia sobre el funcionamiento de las glándulas. Por ejemplo, las adrenales producen mayor cantidad de cortisol. Pueden causar estrés físico: los traumas, enfermedades, temperaturas extremas, reacciones alérgicas, enfermedades graves o grandes cirugías como el cinturón gástrico.
• Factores externos. Se han identificado decenas de miles de sustancias químicas que pueden afectar el sistema endócrino. Si trabajas en especialmente en contacto con derivados del petróleo estos pueden causar diversos trastornos.
• Genética. Cromosomas ausentes, adicionales o deteriorados pueden afectar el funcionamiento hormonal.

Atención endócrina en España

¿Tu médico clínico te ha derivado a un endocrino? Entonces te interesará saber que puedes encontrar atención, tanto en establecimientos públicos como a través de las mutuas privadas o seguros de salud.

La mayoría de los hospitales públicos cuenta con un servicio de Endocrinología y Nutrición. Los seguros de salud incluyen la Endocrinología dentro de las especialidades que requieren copago y también en la modalidad cuadro médico. Sin embargo, en algunos casos las compañías de seguros seleccionan a sus clientes y los trastornos endócrinos pueden estar fuera de los criterios de contratación.

Si estás dentro del grupo de riesgo, en algún momento necesitarás la atención de un endocrino, toma en cuenta nuestros consejos antes de contratar tu seguro. ¡Cuida tu salud!